El pasado mes de noviembre, cuando se acercaba la fecha límite para la transposición de la Directiva, el DECO hizo una declaración pública al Gobierno sobre la Directiva relativa a las acciones de clase, en la que la Asociación Portuguesa para la Protección de los Consumidores compartió sus preocupaciones. Sin embargo, no se hizo nada y la Directiva ni siquiera se transpuso a la legislación del país.
"Aunque Portugal se benefició durante muchos años de un sistema similar e incluso más amplio, la transposición de la directiva cambiará la realidad desde una perspectiva europea, ya que este no era el caso en la mayoría de los países europeos", dijo DECO.
Esta directiva facilitará en breve a los consumidores europeos en general la búsqueda de justicia y la indemnización por los daños sufridos. En Portugal, la indemnización real que recibirán los consumidores dependerá de una amplia gama de decisiones que puede tomar el Gobierno.
A este respecto, DECO ya ha enviado cartas al Ministro de Justicia y al anterior Secretario de Estado de Turismo, Comercio y Servicios, alertándoles de la necesidad de tomar las decisiones adecuadas. Sin embargo, aún no se conoce ningún proyecto de ley de transposición, a pesar de que el plazo para transponer la Directiva ya ha expirado.
La Directiva se limita a un conjunto de cuestiones que no incluye ámbitos como el medio ambiente, la justicia climática o la vivienda. No obstante, DECO recuerda que los Estados miembros son libres de ampliar el ámbito de aplicación de esta Directiva. En este sentido, la Asociación de Consumidores está de acuerdo con ampliar el ámbito de aplicación en la medida de lo posible.
Paula Martins is a fully qualified journalist, who finds writing a means of self-expression. She studied Journalism and Communication at University of Coimbra and recently Law in the Algarve. Press card: 8252