Vítor Reis, ex presidente del Instituto de Vivienda y Rehabilitación Urbana, declaró a CNN Portugal que el problema de la falta de oferta de viviendas no puede resolverse con "medidas hostiles hacia quienes invierten" en el mercado inmobiliario del país.
La APR (Asociación Portuguesa de Complejos Turísticos Residenciales) cree que la prohibición de los visados de oro puede tener resultados "devastadores" en el turismo y la inversión en el país, ya que muchas de las propiedades compradas a través del visado de oro "no son adecuadas para que las familias portuguesas vivan su día a día".
Anteriormente ya se habían introducido cambios para restringir la emisión de visados de oro relacionados con la inversión inmobiliaria, siendo una de estas medidas la prohibición de que las propiedades situadas en zonas densamente pobladas y de gran afluencia turística puedan optar al visado.
Los partidarios de la supresión del visado de oro esperan que impida que los inversores extranjeros adquieran propiedades en el mercado a precios elevados, lo que ha provocado la inflación de los precios y los alquileres en los últimos años.