La consultora inmobiliaria JLL estima en al menos 1.800 millones de euros la inversión para 2023, aunque la cantidad puede variar, dada la volatilidad de las operaciones.


La consultora prevé una ralentización "natural" de la dinámica de la demanda tanto de ocupación como de inversión respecto al año pasado, debido a la doble circunstancia de afrontar un empeoramiento de las condiciones económicas y "compararse con niveles récord de actividad". Sin embargo, no anticipa rupturas disruptivas en términos de volumen transaccionado y absorción, previendo aún que precios y alquileres puedan mantener una trayectoria positiva, pero más suave. La baja capacidad de reposición de la oferta, que sigue siendo escasa en todos los segmentos, es una de las explicaciones de este comportamiento.


"No nos hacemos ilusiones de que el empeoramiento de las condiciones económicas en Portugal y en Europa deje de contaminar el mercado inmobiliario, pero, en general, tenemos mucha confianza en que mantendremos buenos niveles de actividad en 2023, en línea con la dinámica del mercado. A base de demanda imobiliária a ser satisfeita é muito grande e também diversificada nas suas motivações, capacidade financeira e origem", diz Pedro Lancastre, CEO da JLL.


Aun así, el directivo subraya que "el ritmo de producción inmobiliaria debería ralentizarse, porque aunque promotores e inversores no anticipen caídas significativas de la demanda, habrá más dificultades para acceder a financiación para nuevos proyectos, en un contexto en el que los costes de construcción se estabilizan y en el que la concesión de licencias se demora demasiado".


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