El polen presente en el aire procede esencialmente de pinos, olivos, encinas y otros robles, así como de ortigas, gramíneas, llantén y acedera.
En el archipiélago de Madeira y las Azores, se espera que el polen atmosférico se presente en un nivel bajo.
Según la SPAIC, deben evitarse las actividades al aire libre cuando las concentraciones de polen sean elevadas.
También recomienda mantener las ventanillas del coche cerradas siempre que se viaje, para reducir el contacto con el polen. Los motoristas deben llevar casco integral.
Cada semana, el boletín polínico publica los niveles de polen en la atmósfera, recogidos mediante la lectura de postes en diversas regiones del país.