"Vodafone Portugal iniciará, en el plazo de un año, a partir de julio de 2024, de forma progresiva, la desconexión de su red 3G, un paso importante para reforzar el acceso de los clientes del país a comunicaciones más rápidas, eficientes e incluso seguras", informa ECO.
Según la compañía, "la inmensa mayoría de los clientes de Vodafone no se verán afectados por este cambio", puesto que ya disponen de equipos y tarjetas SIM compatibles con 4G y 5G, tecnologías más recientes. En cuanto al resto, para no quedarse sin comunicaciones, serán "oportunamente contactados por Vodafone y dispondrán de un plazo ampliado" de un año para adquirir un nuevo móvil o actualizar su tarjeta.
La operadora recuerda que lanzó las comunicaciones de tercera generación en Portugal en 2004 y que ha llegado el momento de evolucionar, de forma similar a lo que ya está haciendo en muchos otros países europeos. La decisión se inscribe, por tanto, en una "tendencia mundial de abandono de las tecnologías más antiguas".
"Este cambio es inevitable ante la evolución tecnológica y permitirá dar respuesta al creciente consumo de datos, reasignando las frecuencias utilizadas hasta ahora por 3G para el uso de redes más modernas como 4G y 5G. Con esta actualización, que beneficia la digitalización del país, las comunicaciones ganan más velocidad, capacidad, estabilidad, eficiencia y resiliencia", concluye Vodafone Portugal.