Los datos publicados por la oficina estadística comunitaria, Eurostat, indican que el año pasado, "el 9,5% de la población de la UE no pudo permitirse una comida que contuviera carne, pescado o un equivalente vegetariano cada dos días", un valor 1,2 puntos porcentuales superior al de 2022, cuando fue del 8,3%.
"Además, centrándonos en las personas en riesgo de pobreza, en 2023 el porcentaje a nivel de la UE fue del 22,3%, lo que supone un aumento de 2,6 puntos porcentuales en comparación con 2022", del 19,7%, añade.
Por países, el mayor porcentaje de personas en riesgo de pobreza que no pueden permitirse una comida adecuada se registró en Eslovaquia (45,7%), seguida de Hungría (44,9%) y Bulgaria (40,2%).
En cambio, el porcentaje más bajo se registró en Irlanda (4,2%), seguida de Chipre (5,0%) y Portugal (5,9%).
En la UE, la diferencia entre la población total y la población en riesgo de pobreza en términos de acceso a una comida adecuada fue de 12,8 puntos porcentuales.
Por Estados miembros, Hungría registró la mayor diferencia, con 30,2 puntos porcentuales, seguida de Eslovaquia (27,9 puntos porcentuales) y Grecia (27,3 puntos porcentuales), mientras que Suecia, Chipre, Luxemburgo, Portugal e Irlanda registraron las menores diferencias, todas ellas inferiores a cuatro puntos porcentuales.