En un comunicado, la ASAE señaló que, en el ámbito de la Operación Depósito, "se determinó la suspensión total de la actividad de tres establecimientos, debido al ejercicio ilegal de la actividad de almacenaje y la posterior puesta en el mercado de productos sin la debida marca de identificación".

Según la autoridad, se incautaron más de 17 toneladas de diversos productos alimenticios, así como 313 kilos de crustáceos vivos, "todo ello por un valor estimado de más de 68.000 euros".

Según ASAE, "se incoaron tres expedientes de infracción administrativa por carecer de número de control veterinario (NCV), asignado por la autoridad competente, que garantice el cumplimiento de las normas de seguridad alimentaria y de las disposiciones legales de la normativa aplicable, tanto ante los consumidores como ante las autoridades de control, hecho que incumplían estos operadores económicos".

La operación se llevó a cabo en los municipios de Guimarães y Fafe, en el distrito de Braga, y Póvoa de Varzim, distrito de Oporto, por la Brigada de Industrias de la Unidad Regional Norte - Unidad Operativa de Oporto.

El objetivo de esta acción de inspección fue "garantizar el cumplimiento de las normas legales de seguridad alimentaria y de la actividad económica".