La cifra se compara con una estimación de 3.610 millones de euros, publicada tres meses después del suceso, y con otra de hace seis semanas, que constataba 3.290 millones de euros de posibles pérdidas.
PERILS informó de que se presentaron alrededor de 1,9 millones de reclamaciones y su impacto estimado representa la mayor pérdida europea desde el ciclón Kyrill en enero de 2007.
La mayor parte de los daños se produjeron en Alemania, seguida de los Estados del Benelux, el Reino Unido y Francia. Se produjeron pérdidas menores en Austria, Suiza y Dinamarca. Polonia y la República Checa también se vieron afectadas, pero no están incluidas en el estudio.