En una nota publicada hoy, la aerolínea revela que entre julio y septiembre registró "un récord histórico de ingresos operativos", que ascendieron a 1.100 millones de euros, "superando los niveles anteriores a la crisis en un 7,5%", lo que le permitió alcanzar "un rendimiento financiero sin precedentes".
Este resultado, indica la nota, fue "impulsado por los fuertes resultados operativos y los efectos positivos de la aplicación de la política de cobertura de divisas", que también "redujo el impacto de las divisas de los anteriores trimestres de 2022".
"Esta situación está relacionada con la actual estrategia de gestión del riesgo financiero de TAP, que tiene como objetivo reducir la volatilidad de los impactos de las variaciones del tipo de cambio en la cuenta de resultados. Incluso excluyendo la mencionada mejora en la política de cobertura de tipos de cambio, el resultado neto sigue siendo positivo, con 31,8 millones de euros.
En la información difundida hoy, la presidenta de TAP, Christine Ourmières-Widener, afirma que la compañía "confirma la solidez de sus resultados en el tercer trimestre, con todas las métricas financieras por encima de los niveles anteriores a la crisis, a pesar del aumento del combustible".
La demanda para el cuarto trimestre "sigue siendo bastante fuerte, lo que apoya las expectativas de un buen resultado acumulado hasta finales de año", afirma el directivo, que añade: "La visibilidad para el próximo año es, sin embargo, todavía limitada y, dadas las incertidumbres de la situación actual, es cada vez más crucial que mantengamos el enfoque en nuestro plan estratégico, que hasta ahora ha demostrado ser eficaz."