Una pareja que regentaba establecimientos de restauración en Sintra, Lisboa, fue detenida el martes por robar dinero y objetos de valor a los clientes cuando quedaban inconscientes, tras servirles bebidas con psicofármacos, según informó la PSP.
"Las víctimas identificadas en el sumario perdieron un importe total de 33.859 euros", destacó la PSP.
La PSP señala que la investigación se inició tras las denuncias de varios delitos de hurto, en los que las víctimas habían ingerido bebidas alcohólicas con benzodiacepinas en determinados establecimientos de hostelería, que tenían en común los mismos propietarios.
Los establecimientos de restauración en los que se produjeron los delitos, situados en las parroquias de Mem-Martins y São Marcos, en Sintra, eran regentados entonces por una pareja que, al percatarse de que los clientes tenían grandes sumas de dinero u objetos de valor, les servían bebidas con sustancias que les ponían "en un estado de somnolencia, en el que algunos perdían la 'conciencia', siendo incapaces de resistirse a que les sustrajeran sus bienes o dinero".
Los clientes, tras ser asaltados, eran encontrados en la vía pública o en sus vehículos, "en un estado de debilidad física evidente o inconscientes, por lo que eran trasladados a centros hospitalarios", añadió la PSP.
Las víctimas fueron ingresadas en los hospitales debido a su estado de embriaguez, pero más tarde se descubrió que tenían altas concentraciones de benzodiacepinas en el cuerpo, dijo la policía.
Una de las víctimas tuvo que ser reanimada y un hombre fue localizado en el IC19, en la zona de Rio de Mouro, desmayado en el interior del vehículo de la empresa donde trabaja, "de donde los sospechosos habían sustraído cerca de 21.000 euros en volúmenes de tabaco e importe monetario".
La PSP ejecutó órdenes de detención y de registro tanto en el domicilio de los sospechosos como en los dos establecimientos de restauración que regentan actualmente, en Tapada das Mercês (Sintra) y Quinta do Conde (Sesimbra).
Durante los registros, la PSP recuperó e incautó cerca de 3.000 euros, 1.293 cajetillas de tabaco (por valor de unos 6.465 euros), 420 cajetillas de tabaco electrónico (por valor de unos 2.100 euros), cuatro teléfonos móviles, un coche, una "tablet" y varios medicamentos con benzodiacepinas.