Según los cálculos del Servicio Copérnico para el Cambio Climático (C3S), implementado por el Centro Europeo de Previsiones Meteorológicas, durante el mes de julio las temperaturas medias globales de la superficie del mar fueron 0,51 grados centígrados superiores a la media de 1991-2020. Las temperaturas de la superficie terrestre fueron 0,72 grados Celsius superiores a la media de 1991-2020 para el mes de julio y 0,33 grados Celsius más cálidas que el anterior mes más cálido, julio de 2019.

En un comunicado, Samantha Burges, subdirectora de Copernicus revela que "las temperaturas atmosféricas globales y las temperaturas globales en la superficie de los océanos establecieron nuevos récords históricos en julio", y que los datos recogidos por el CS3 sugieren, aunque prematuramente, que "2023 es actualmente el tercer año más cálido hasta la fecha".

Según el funcionario, la información anunciada "muestra la urgencia de realizar esfuerzos ambiciosos para reducir las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero, que son el principal motor de estos récords".

En el informe, el secretario general de la Organización MeteorológicaMundial (OMM), Petteri Taalas, advirtió que "la necesidad de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero es más urgente que nunca. La acción por el clima no es un lujo, sino una obligación", afirmó.

Ya mirando todo el año hasta julio, Copérnico indica que "la media global para 2023 es la tercera más alta registrada, con 0,43 grados centígrados respecto a 1991-2020", lo que contrasta con el superávit de 0,49 grados centígrados registrado en 2016, y de 0,48 grados centígrados para 2020, detalla el responsable.

La OMM ve un 98% de probabilidades de que al menos uno de los próximos cinco años sea el más caluroso de la historia, y un 66% de probabilidades de superar temporalmente los 1,5ºC por encima de la media de 1850-1900 durante al menos uno de los próximos cinco años.