Gran parte de los terrenos que rodean el pueblo fueron comprados por la familia Espírito Santo en los años 50, que a lo largo de los años han ido vendiendo franjas de terreno a promotores inmobiliarios. JNCQUOI, una empresa promotora de lujo, por ejemplo, ha construido un complejo cerrado de villas de playa y lo ha calificado de "uno de los destinos más exclusivos de Europa". También está Atlantic Club, que tiene 21 parcelas en Comporta, y CostaTerra Golf and Ocean Club, que cuenta con la inversión de George Clooney.

Con la afluencia de nuevas inversiones en complejos y villas de lujo, los precios de la vivienda en el pequeño pueblo se han disparado. El banquero londinense Dan Dalton, que compró una casa en 2019 con su marido en el complejo turístico Spatia Comporta, dijo a FT.com que "se están abriendo nuevos restaurantes y se está aburguesando. Los precios de las propiedades se han vuelto locos. Villas como la nuestra se venden por el triple de lo que pagamos por ella".

El Sistema de Información Residencial, que hace un seguimiento de las transacciones inmobiliarias en el país, muestra que el precio medio de una vivienda nueva en la zona de Dalton era de 7.112 euros por metro cuadrado en 2022, frente a los 2.690 euros de 2020, señaló FT.com. El mismo sistema, señalaron, reveló que había 27 viviendas en Comporta en 2020 y 104 en 2022.

Beata Baumgartner, de Munich, está renovando una propiedad de tres dormitorios en el pueblo vecino de Carvalhal y dijo a FT.com que este grupo de gente adinerada en busca de casas de vacaciones ha superado los precios de los locales, haciendo que muchas propiedades y restaurantes sean prácticamente inasequibles.

"Cobrar 18 euros por un plato de calamares fritos u 8 euros por una ración de arroz es demasiado. Los clubes de playa han cambiado", ejemplifica. "Ahora hay villas de 5 millones de euros en zonas próximas a gente que vive en la pobreza; mis vecinos viven en una casa de una sola habitación y cocinan en una barbacoa todas las noches".

Otro ejemplo es el restaurante Praia na Comporta, en cuyo Instagram aparecen menús como cangrejo real en salsa de mantequilla por 80 euros, un filete de wagyu japonés de primera calidad de 300 gramos por 190 euros, un postre compuesto de galleta de chocolate, gateaux de caramelo, pudding y fresas por 35 euros y, según el subdirector de Air Mail, Michael Hainey, un "buen vino local" por 350 euros cada uno.

Sin embargo, los lugareños parecen haberse hartado de la merma de su poder adquisitivo, ya que la comunidad ha conseguido protestar con éxito y rechazar una oferta de 113 millones de euros del grupo hotelero de lujo Aman.