¿De qué se trata?

El Amarok original fue un gran éxito para Volkswagen. Reinventó por completo el segmento de los pick-up y demostró que los camiones no tenían por qué conducir como vehículos agrícolas: podían ser tan cómodos y utilizables como un SUV normal. Además, no se amilanaba ante un duro día de trabajo.

Pero el panorama automovilístico es complicado para navegar en solitario, y por eso Volkswagen se ha asociado con Ford en este último Amarok, que ahora se fabrica junto con el superventas Ranger del óvalo azul. ¿Ha funcionado esta asociación? Lo hemos averiguado.


¿Cuáles son las novedades?

El hecho de que se fabriquen en la misma línea significa que encontrarás muchas similitudes entre el Amarok y el Ranger de Ford, pero Volkswagen ha hecho todo lo posible para asegurarse de que no se trata de una configuración idéntica. El diseño exterior, por ejemplo, es un poco más parecido al Amarok de la generación anterior, mientras que en el interior tenemos pantallas que ejecutan el propio software de Volkswagen, aunque las propias pantallas sean de Ford.

Volkswagen no ha olvidado que para muchos el Amarok será una herramienta de trabajo, razón por la cual todos los modelos incorporan de serie una variedad de características robustas y robustas y tracción a las cuatro ruedas.


¿Qué hay bajo el capó?

Solo el Amarok básico viene con un motor diésel turboalimentado de 2,0 litros, mientras que el resto -incluida "nuestra" versión PanAmericana- utiliza en su lugar un Ford V6 diésel turboalimentado de 3,0 litros. También está asociado a una caja de cambios automática de 10 velocidades de serie, mientras que todas las versiones tienen tracción a las cuatro ruedas seleccionable.

Con una potencia de 236 CV y un par motor de 600 Nm, el Amarok es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 8,8 segundos y alcanzar una velocidad máxima de 112 km/h. También está preparado para remolcar hasta 3.500 kg de remolque con frenos, uno de los mejores pick-ups a la venta hoy en día.


¿Cómo es conducirlo?

Por supuesto, el Amarok es una gran bestia -es más largo que un Range Rover-, por lo que cuesta un poco acostumbrarse a conducirlo, sobre todo a la hora de aparcar. Sin embargo, una vez aclimatado, el Amarok no es tan difícil de conducir. La conducción a baja velocidad es muy dura, eso sí, y sin carga golpea con fuerza en los baches.

A mayor velocidad, esto se reduce y el refinamiento tampoco está mal. El cambio automático de 10 velocidades - como encontramos en el Ranger - parece que tiene demasiados engranajes. Pisa el acelerador a fondo y se queda tambaleándose mientras decide cuál de las muchas marchas necesita. Una caja de cambios con menos relaciones parece que encajaría mucho mejor.

Créditos: PA; Autor: PA;

¿Qué aspecto tiene?

Podría decirse que el Volkswagen Amarok es aún más grande que la vida en su segunda encarnación. El primero apenas era un mosquito, pero esta última versión resulta aún más atrevida y se parece más a los pick-ups de gran tamaño que se pueden encontrar en Estados Unidos.

El frontal es realmente erguido y robusto, mientras que la variedad de elementos cromados le confieren un esquema cromático similar al anterior. Además, el Amarok solo puede adquirirse con cabina doble, mientras que el Ranger puede tener una configuración de cabina simple más orientada al trabajo.


¿Cómo es por dentro?

El Amarok anterior marcó un hito en la calidad del interior de los pick-ups, por lo que es importante intentar mantenerlo en la nueva versión. En gran medida, se ha conseguido; las secciones del salpicadero presentan unos bonitos acabados, mientras que el cuadro de mandos transmite una agradable sensación de robustez. Hay diales giratorios para los modos de tracción a las cuatro ruedas, pero todo lo demás se encuentra dentro de la pantalla. Cambiar la calefacción con guantes cuando hace frío es prácticamente imposible.

El espacio en las plazas traseras no es tan malo, aunque hay una joroba de transmisión bastante gruesa en el centro. También tienes muchas opciones de carga en la parte trasera, con USB-C y enchufes de nueve voltios disponibles.

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¿Cómo son las especificaciones?

Amaroks en el nivel de entrada "Life" trae una configuración bastante básica con llantas de acero y aire acondicionado manual - aunque el control de crucero de serie es un toque útil. Es el modelo que debes elegir si quieres un auténtico caballo de batalla.

Si te pasas al PanAmericana, como "nuestro" Amarok -que es uno menos que el Aventura de máxima especificación-, obtendrás de serie llantas de aleación de 18 pulgadas, un sistema de sonido Harman Kardon y asientos de cuero. Aumenta considerablemente el precio, sin embargo, también obtienes un enorme sistema de infoentretenimiento de 12 pulgadas -compartido con el Ranger- que tiene todas las funciones multimedia y de navegación incluidas, así como Apple CarPlay y Android Auto. Ambos funcionan realmente bien en esta pantalla tan grande, también.

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Veredicto

La colaboración entre Volkswagen y Ford parece haber sido un éxito, si nos atenemos al nuevo Amarok. Continúa donde lo dejó su predecesor, puliendo la idea de un pick-up premium e incorporando tecnología inteligente.

Nos gustaría que la conducción fuera un poco más cómoda, y también sería estupendo disponer de más mandos físicos en el interior, pero como perspectiva general, el Amarok es tan atractivo como su predecesor.


Resumen de datos:

Modelo: Volkswagen Amarok PanAmericana

Motor: V6 diésel turboalimentado de 3,0 litros

Potencia: 236 CV

Par motor: 600 Nm

Velocidad máxima: 112 mph

0 a 100 km/h: 8,8 segundos

MPG: 28mpg

Emisiones: 265 g/km