Según Ryanair, entre septiembre y diciembre, la aerolínea esperaba recibir 27 aviones Boeing, sin embargo, debido a "retrasos en la producción en las instalaciones de Spirit Fuselage en Wichita, combinados con reparaciones de Boeing y retrasos en las entregas en Seattle", la compañía solo recibirá 14 aviones entre octubre y diciembre.
"Ryanair está trabajando con Boeing para intentar acelerar las entregas en el periodo de enero a mayo de 2024, de forma que pueda entrar en la temporada alta de viajes del verano de 2024 con todas las entregas de 57 nuevos aviones Boeing según lo previsto", explica la aerolínea.
Los retrasos en las entregas de aviones Boeing han llevado a Ryanair a ajustar y reducir su calendario de invierno, lo que implica recortes en las operaciones en las bases de Charleroi, que tendrá tres aviones menos basados, así como en Dublín (dos aviones menos), y en cuatro bases italianas, entre ellas Bérgamo, Nápoles y Pisa, que tendrán cinco aviones menos que el invierno pasado.
Los recortes en las operaciones de invierno de Ryanair también afectan a Portugal, ya que la aerolínea ha revelado que "también habrá reducciones de aviones en East Midlands (Reino Unido), Oporto y Colonia".
A pesar de afirmar que estas reducciones son "inevitables", Ryanair pide disculpas a sus pasajeros y explica que "no dispone de aviones de repuesto este invierno, ya que es necesario realizar un mantenimiento programado" en toda la flota de la compañía, que cuenta con más de 550 aeronaves, por lo que todos los aviones "están operativos para su programa de verano más largo en 2024".