"Los barrios se han convertido en 'Disneylands', tienen demasiada gente. La terminal de cruceros, por ejemplo, en Lisboa, descarga en la ciudad miles de personas en un fin de semana que no consumen, no dejan nada, salvo basura y presión y contaminación, debido a los propios cruceros", advirtió Mariana Mortágua, en declaraciones a los periodistas en el barrio de Alfama, en Lisboa.
La dirigente del BE visitó este barrio con el objetivo de concienciar sobre fenómenos como el "turismo excesivo", la construcción de nuevos hoteles o el aumento de los alojamientos de proximidad en la capital, pero también en otras partes del país, como Oporto y el Algarve.
"Llega un momento en que tenemos que mirar la realidad de la gente, cómo vive, cómo no puede permitirse una vivienda, cómo la economía depende excesivamente del turismo, cómo el turismo presiona a nuestras ciudades, provoca contaminación, y es que tengo que decir que hay un límite y que el turismo debe tener reglas. Debe haber un límite al número de hoteles que se pueden construir en Lisboa y debe haber un límite al número de alojamientos locales que puede albergar un barrio como Alfama", argumentó.
Con varias críticas al presidente del Ayuntamiento de Lisboa, Carlos Moedas (PSD), Mortágua afirmó que desde el inicio del mandato del socialdemócrata, en Lisboa "se han abierto hoteles a un ritmo de dos cada mes".
"No nos digan que el problema de la vivienda es un problema de falta de construcción, porque la construcción para hoteles, para alojamientos locales, para condominios de lujo, ha continuado. El problema es que cada vez se chupan más casas para el turismo, para viviendas de lujo, que están dirigidas al mercado extranjero, y no hay casas donde la gente pueda vivir", argumentó.