Con la apertura de la Ecovía del Mondego, un proyecto que supuso una inversión de 1,7 millones de euros, las localidades de Santa Comba Dão, Mortágua, Penacova y Vila Nova de Poiares están ahora directamente conectadas. Esta ecovía, que recorre el valle del río Mondego a lo largo de 40 km, se presentó a concurso en el marco del programa "Valorizar" de Turismo de Portugal.
"La apertura de esta instalación es importante para el crecimiento de nuestra región", declaró a la prensa el alcalde de Santa Comba Dão, Leonel Gouveia, señalando que, mientras que en el norte ya existían las ecopistas de Dão y Vouga, no había conexión con el sur. Emílio Torrão, presidente de la CIM Região de Coimbra, se centró en la "estrategia de movilidad blanda que hace especial hincapié en las ecopistas y los carriles bici".
Pedro Machado, secretario de Estado de Turismo, destacó el valor de que las regiones cooperen en red, subrayando que esto es especialmente importante para "maximizar los recursos financieros disponibles", como fue el caso de la Ecovía do Mondego. Según el responsable, "será una ruta sorprendente que estará entre las más atractivas del país".
Utilizando las ecopistas y ecovías que ahora unen las Regiones CIM de Viseu Dão Lafões y Coimbra, prosiguió, será factible "estructurar cada vez más el producto turístico" y seguir siendo competitivos. Estamos invirtiendo en movilidad blanda, en un turismo más próximo al territorio y, por tanto, más sostenible, y estamos invirtiendo en la captación de nuevos flujos", explicó Pedro Machado. En su opinión, hay muchos turistas que están dispuestos "a invertir más en el destino de vacaciones si ello contribuye también a la descarbonización, a una cierta reducción de la huella que todas las actividades económicas acaban impactando".