En un comunicado, el ayuntamiento añadió que están previstas 16 unidades de alojamiento, con una inversión de cerca de 1,2 millones de euros que se financiarán al 100% con fondos del Plan de Recuperación y Resiliencia (PRR).

El alcalde de Braga, Ricardo Rio, afirmó que el proyecto dará una respuesta "inmediata y no permanente" para que la población migrante "no se vea sometida a situaciones indignas".

"Todos los días nos enfrentamos a la necesidad de contratar nuevos trabajadores por parte de las empresas, a lo que los inmigrantes responden. Si bien todos estamos de acuerdo en que la inmigración debe ser regulada y responsable, para no convertirse en un factor de inestabilidad social, también es innegable que genera un impacto económico muy positivo y es una fuente de progreso y desarrollo para el municipio", afirmó.

Según el alcalde, el municipio viene actuando "hasta el límite de sus posibilidades" para que existan las condiciones para acoger a los inmigrantes y "mitigar las consecuencias que tienen para el territorio".

"Este es un centro que, además de acoger, es un espacio de formación, proporcionando herramientas para que los que están aquí puedan encontrar un empleo profesional y desarrollar sus carreras", dijo también Ricardo Rio.

João Rodrigues, presidente del consejo de administración de BragaHabit, destacó que este proyecto resolverá el problema de una instalación abandonada desde hace muchos años.

"El centro permitirá rehabilitar un edificio que lleva décadas sin dar servicio a la población y que está situado en una zona privilegiada del municipio. Al mismo tiempo, responde a la necesidad de encontrar una solución a una realidad que no podemos ignorar y que incluso puede intensificarse en el futuro", afirmó.