Ahora la NASA ha permitido a la empresa de capital privado Axiom Mission transportar a tres ricos hombres de negocios (un israelí, un canadiense y un estadounidense) en una cápsula Space X a la Estación Espacial Internacional por el módico precio de 55 millones de dólares cada uno. Fueron escoltados por el ex astronauta de la NASA Michael López-García, que ahora es vicepresidente de Axiom, e informaron de que los visitantes habían "realizado experimentos" para evaluar las posibilidades comerciales del turismo espacial en órbita baja.
En una presentación virtual que se hará en los medios de comunicación, se mostrarán imágenes en 3D de la primera aldea espacial, que constará, inicialmente, de cincuenta unidades habitacionales globulares, cada una de ellas con acoplamiento privado. Estarán conectadas a un bloque central con oficinas, boutiques, servicios de restauración e instalaciones recreativas que incluirán un gimnasio y una pista de baloncesto.La estación, que se llamará El-on-Garb, funcionará como un condominio cerrado con alquileres discretos y exclusivos gestionados por Space BnB. Se invita a reservar sobre plano con precios cotizados en cosmocoin, una criptomoneda destinada únicamente a la circulación universal.
A esta primera estación le seguirán otras estaciones en órbita baja y un pequeño complejo turístico lunar del más alto lujo que se construirá en las orillas del Mare Serenitatis para las empresas de DT. A su vez, estos son el preludio de la apertura de Muskville, el primer gran municipio marciano diseñado exclusivamente para los oligarcas.
En un momento en el que los científicos del medio ambiente nos advierten de los graves riesgos para el clima que puede provocar el turismo global, esta especulación permite vislumbrar el futuro estilo de vida de la élite privilegiada.
por correo electrónico Roberto Knight Cavaleiro, Tomar