El objetivo principal del documento es reducir la incidencia de los tumores prevenibles, al tiempo que se aumenta la supervivencia y la calidad de vida de los pacientes y supervivientes de la enfermedad.

Se prevén cambios en el diagnóstico y el tratamiento, con mejoras en la red de derivación oncológica, pero otro eje es la prevención, mitigando el riesgo de exposición al tabaco o al alcohol y promoviendo estilos de vida más saludables.

En declaraciones a CNN Portugal, José Dinis el coordinador de coordinador del Programa Nacional de Enfermedades Oncológicas de la DGS, sostiene que las imágenes de las cajetillas de cigarrillos son impactantes, pero que eso no es suficiente: el tabaco es el principal factor de riesgo de las enfermedades oncológicas y es responsable del 20% de los casos y del 33% de las muertes.


Aumentar la edad mínima legal

La Estrategia Nacional de Lucha contra el Cáncer pretende "limitar" el acceso al tabaco a través de varias estrategias, en concreto aumentando los precios, tal y como prevén las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud. Otros objetivos son la regulación de los ingredientes del tabaco, incluidos los aromatizantes, pero también el aumento de la edad mínima legal para los autorizados a comprar tabaco de los 18 a los 21 años actuales.


Altos niveles de consumo de alcohol

Otro de los objetivos de la Estrategia Nacional de Lucha contra el Cáncer es el consumo de alcohol, donde Portugal también destaca por ser uno de los países europeos donde más se consumen bebidas alcohólicas. Según el documento, "se estima que el 3,6% de la población portuguesa tiene un consumo de alto riesgo/nocivo (2,8%) o dependencia (0,8%)" y "en 2019 se produjeron 2.507 muertes por enfermedades en Portugal atribuibles al alcohol (2,2% de la mortalidad en el país), la segunda cifra más alta de los últimos siete años".

Para combatir los números anteriores, la estrategia nacional elaborada por la DGS abre la puerta al aumento de los precios del alcohol a través de una propuesta de actualización anual de los tipos impositivos de estas bebidas. Sobre la mesa siguen las propuestas para restringir la comercialización y la publicidad de las bebidas alcohólicas.