En un comunicado, la Sociedad Portuguesa de Endocrinología, Diabetes y Metabolismo(SPEDM) también considera que, si bien existen restricciones en el acceso al medicamento debido a la cantidad disponible, los pacientes con diagnóstico de diabetes deben ser lo primero.
"En las condiciones actuales, la SPEDM entiende que no se debe prescribir este fármaco como si el paciente fuera diabético. Además, mientras existan restricciones en el acceso al fármaco por la cantidad disponible, se debe privilegiar a los pacientes con diagnóstico de diabetes".
Esta postura de la SPEDM se produce tras la polémica sobre el acceso a este fármaco -que está aprobado para la diabetes, pero que, al imitar las hormonas que regulan la sensación de saciedad, ayuda a perder peso-, cuya demanda se ha disparado en los últimos tiempos, dificultando el acceso de los pacientes diabéticos.
La SPEDM recuerda que, en Portugal, este medicamento sólo está disponible en la dosis adecuada para el tratamiento de la Diabetes Mellitus tipo 2 y que "es para estos pacientes para los que está previsto su reembolso".
Afirman que ya han mostrado su disposición a colaborar con las autoridades sanitarias, "con el fin de encontrar una mejor solución para la gestión de este problema, con el fin de mantener la necesaria accesibilidad a los tratamientos innovadores por parte de los pacientes".