En los últimos días han aparecido en los medios de comunicación informaciones que ponen en duda la calidad del agua suministrada por EPAL.
En un comunicado enviado a la agencia Lusa, la empresa que abastece a la región de Lisboa subrayó que "la vigilancia/monitoreo de la calidad del agua a lo largo de todo el sistema de abastecimiento (...), desde los recursos hídricos utilizados hasta el punto de entrega al consumidor, constituye uno de los mayores compromisos de EPAL".
En concreto, EPAL subrayó que la investigación sobre los PFAS (compuestos perfluoroalquílicos y polifluoroalquílicos) está prevista en la directiva europea sobre la calidad de las aguas destinadas al consumo humano y añadió que, en el ámbito de su Plan de Control de la Calidad del Agua (PCQA), lleva a cabo "la búsqueda/seguimiento sistemático de los 20 PFAS previstos" en la directiva.
EPAL también explicó que la calidad del agua suministrada a los municipios y distribuida a los consumidores directos en la ciudad de Lisboa se garantiza "mediante el análisis de más de 25.000 muestras de agua al año".
"Estas muestras se toman en cerca de 1.500 puntos de muestreo representativos de todo el sistema de abastecimiento de la empresa, donde se realizan más de 300.000 análisis para verificar el cumplimiento de los requisitos legales aplicables, lo que permite evidenciar la excelente calidad del agua suministrada por la empresa y el cumplimiento de la legislación vigente, otorgando así un sello de calidad concedido por ERSAR [Entidad Reguladora de los Servicios de Agua y Residuos] al agua consumida por cerca de 3 millones de personas", destacó también la empresa.