Cuando lo abrió, se quedó "atónito" al encontrar dos cajas de Weetabix pegadas con cinta adhesiva. Tras ponerse en contacto con Amazon, afortunadamente consiguió que la empresa se disculpara y le devolviera el dinero. Una vez terminada la saga, Yearsly supo tomárselo bien, y el tema se convirtió en una buena fuente de risas en el trabajo.