La recaudación de la tasa turística fue de 164 mil euros, en 2022, primer año en que entró en vigor, y de 207 mil euros, en 2023, explicó el ICNF, interrogado por la agencia Lusa.

El año pasado, la Reserva Natural de las Berlengas, en el distrito de Leiria, fue visitada por 77.586 personas, según el ICNF, en referencia al registro 'online' de visitantes, a través de la plataforma 'Berlengapass', que se implantó ese mismo año.

'Berlengapass' es la plataforma en línea(https://berlengaspass.icnf.pt/) que permite a los turistas reservar su visita y pagar el coste respectivo, que incluye la tasa de visita.

Según el ICNF, el balance de las dos medidas (tasa turística y 'Berlengapass') "es positivo", ya que "permite contabilizar el número de usuarios y controlar su capacidad de carga".

Por tanto, explica el ICNF, "se obtienen beneficios medioambientales en el sentido de que, al reducirse la presión humana, se frena la degradación de los hábitats".

Los ingresos de la tasa turística, según la ley, deben "destinarse preferentemente a la promoción de medidas de valorización", que están previstas en el plan de cogestión y deben coordinarse entre las distintas entidades implicadas en esta gestión.

El plan de cogestión de la reserva se aprobó en diciembre de 2023, explicó el ICNF.

El plan prevé una inversión de 200 mil euros para mejorar las condiciones de visita, concretamente en la mejora de las rutas, la vigilancia y los estudios para mejorar las condiciones de seguridad de los acantilados de Carreiro do Mosteiro y de la playa.

El ICNF está "en la fase final de preparación de un protocolo que se firmará con el Consejo Municipal de Peniche", con el objetivo de destinar "previsiblemente alrededor del 60% de los ingresos procedentes de las tasas" a la aplicación de las medidas de recuperación previstas en el plan de cogestión".

Los ingresos restantes, a cargo del ICNF, se aplicarán a obras de saneamiento, gestión de residuos y abastecimiento de agua de uso público, implantación de alternativas sostenibles de suministro eléctrico y mejora de las infraestructuras existentes en el embarcadero de Carreiro do Mosteiro, considerados proyectos prioritarios.

En 2022, los visitantes de la isla de Berlengas empezaron a pagar una tasa turística de tres euros al día, la mitad para niños y jóvenes de entre 6 y 18 años y para mayores de 65 años.

La isla de Berlenga tiene un límite diario de 550 visitantes al mismo tiempo, establecido por ordenanza, para minimizar los efectos del turismo sobre las especies y los hábitats naturales sensibles, teniendo en cuenta el pequeño tamaño terrestre del archipiélago.

El archipiélago fue clasificado en 2011 como Reserva Mundial de la Biosfera por la UNESCO (Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura), tiene estatus de reserva natural desde 1981, es Lugar Natura 2000 desde 1997 y ha sido clasificado como Zona de Protección Especial para las Aves Silvestres en 1999.