En el documento, elSindicato Portugués de Trabajadores del Transporte(Sttamp) ha emitido un preaviso de huelga, que abarca todos los aeropuertos nacionales, "desde las 00:00 horas del 31 de agosto de 2024 hasta la medianoche del 1 de septiembre de 2024".

La huelga ha sido convocada contra "la existencia de salarios base inferiores al salario mínimo nacional", y también en protesta contra "la utilización sistemática de trabajadores de empresas de trabajo temporal" y "la realización de horas extraordinarias que no respetan los límites legales vigentes".

El sindicato también se refiere a las "sucesivas modificaciones de la jornada laboral que incumplen lo establecido en el Convenio de Empresa" y a "la forma en que se lleva a cabo el expediente de regulación de empleo (ERE) voluntario, bajo amenaza de despido colectivo en una empresa en la que no hay gente para trabajar".

Sttamp también justificó la huelga con el hecho de que "una vez más, independientemente del motivo u origen que debilite a la empresa", siempre son "los trabajadores los que pagan la factura".

Según el comunicado, "los trabajadores garantizarán los servicios necesarios para la seguridad y el mantenimiento de los equipos e instalaciones" y "la prestación de los servicios mínimos imprescindibles para atender las necesidades sociales esenciales".

Sttamp considera que los servicios mínimos en cuestión implican "la realización de los vuelos necesarios para hacer frente a problemas críticos relacionados con la seguridad de las personas y los bienes, incluidos los vuelos ambulancia y los vuelos de emergencia".

También cubren los vuelos gubernamentales y militares y garantizan a las islas unos servicios que permitirán, en las Azores, "el primer aterrizaje y despegue en la ruta entre el continente y la región" y en Madeira "el primer aterrizaje y despegue en la ruta entre el continente y la región", así como "el primer aterrizaje y despegue en el vuelo entre las islas (Funchal y Porto Santo)".

Menzies Aviation anunció en junio que había completado la adquisición del 50,1% en Groundforce Portugal, más de un año después del anuncio del acuerdo para la entrada del nuevo accionista, en marzo de 2023.