El Instituto Portugués del Mar y de la Atmósfera(IPMA) indicó que los distritos de Viseu, Vila Real y Aveiro estarán bajo aviso naranja entre las 06:00 y las 12:00 horas del jueves y los distritos de Oporto, Viana do Castelo y Braga entre las 18:00 horas del miércoles y las 09:00 horas del jueves.
Estos seis distritos ya están bajo aviso amarillo hoy y el miércoles debido a las lluvias persistentes y en ocasiones fuertes.
Debido a las fuertes lluvias, el IPMA también ha colocado a los distritos de Bragança, Guarda y Coimbra bajo aviso amarillo entre las 03:00 y las 12:00 del jueves.
El aviso naranja es emitido por el IPMA siempre que haya una "situación meteorológica de riesgo moderado a alto" y el aviso amarillo cuando hay una situación de riesgo para determinadas actividades dependientes de la situación meteorológica.
El lunes, en un comunicado, el IPMA indicó que la situación se debe al "transporte de una masa de aire tropical, con muy alto contenido de vapor de agua, en la circulación conjunta de un anticiclón situado al sur de las Azores y una región de depresión en el Atlántico Norte".
Según el IPMA, se esperan periodos de lluvias persistentes a partir de hoy en las regiones Norte y Centro y que en ocasiones serán fuertes el miércoles y el jueves, especialmente en la costa al norte de Cabo Mondego y en las regiones montañosas.
En la región Sur, las precipitaciones serán en general débiles, aunque poco probables en el interior del Bajo Alentejo y del Sotavento Algarvío, y podrán ser temporalmente moderadas durante la mañana del jueves.
Tras la previsión del IPMA, la Autoridad Nacional de Emergencia y Protección Civil(ANEPC) advirtió el lunes a la población del riesgo de inundaciones, corrimientos de tierra, desprendimientos y caída de estructuras y árboles.
La ANEPC recomendó la "adopción de comportamientos adecuados", como desatascar los sistemas de evacuación de aguas pluviales, asegurar correctamente las estructuras sueltas, como andamios y paneles, y conducir a la defensiva en las carreteras, reduciendo la velocidad y teniendo "especial cuidado al conducir y permanecer cerca de zonas boscosas".
Ante las previsiones, la ANEPC advirtió de la posibilidad de inundaciones en zonas urbanas debido a la acumulación de agua de lluvia por obstrucción de los sistemas de drenaje e inundaciones "incrementadas por el desbordamiento de los cauces de algunos cursos de agua, ríos y arroyos", así como por el desprendimiento de estructuras móviles o mal aseguradas y el arrastre de objetos sueltos a las carreteras.
En particular, en las zonas afectadas recientemente por incendios forestales, que quemaron la vegetación y cubrieron el suelo de ceniza, la ANEPC destacó el riesgo de desprendimientos, derrumbes y contaminación de las fuentes de agua potable.