"El talento de nuestros equipos es el capital más valioso que tenemos, es nuestra responsabilidad protegerlo, desarrollarlo y crear las condiciones para que se manifieste en su plenitud", afirma José Fonseca, director general de Decathlon Portugal, según informa ECO.

La cadena deportiva aumentó el salario mínimo básico a 900 euros/bruto, que se eleva a 1.040 euros con el subsidio de comida. A esta cantidad se añaden "las primas mensuales por rendimiento (del 0% al 20% del salario base), lo que eleva el importe mínimo mensual a 1.220 euros". A este valor se podrán seguir añadiendo las pagas de antigüedad y las doceavas partes de los subsidios de vacaciones y Navidad", enumera la empresa.

Tras Ikea -que decidió aumentar el salario de entrada hasta los 1.000 euros en 2023-, Lidl -aumentará un 10% el salario de entrada de los operarios de tienda y almacén, que a partir de enero del próximo año empezarán a cobrar 820 euros brutos- y de Mercadona -la cadena incrementará un 11% el salario de entrada de los trabajadores, que percibirán como mínimo 1.034 euros brutos mensuales-.

Decathlon repartió este año dos sobresueldos -un total de 1,9 millones de euros, "la cantidad más alta de la historia"- en concepto de bonus, una cantidad que representa el 10% de los ingresos anuales de cada empleado.


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