El protocolo entre el Instituto de Vivienda y Rehabilitación Urbana(IHRU) y la Dirección General de Administración Escolar (DGAE) se firmó en Portimão, y tiene como objetivo ayudar a "asentar a los profesores desplazados en regiones donde el acceso a la vivienda es difícil".
En un comunicado, los dos ministerios afirman que el IHRU ya ha identificado 15 apartamentos en el centro de Portimão y 14 apartamentos en Lisboa.
Las viviendas también están destinadas a los profesionales de la salud desplazados, además de a los profesores, y en breve deberá firmarse un protocolo similar para este fin.
"Con este protocolo, se crean las condiciones para que los profesionales desplazados puedan acceder a una vivienda a costes asequibles para sus presupuestos, además de contribuir a aumentar el tamaño del parque público de viviendas, dotándolo de mayor capacidad para responder a los diferentes tipos de carencias habitacionales existentes en el territorio nacional", subraya el Gobierno.
Citado en el comunicado, el ministro de Educación, João Costa, afirma que "es un primer paso fundamental para retener a los profesores en las regiones donde la vivienda es un problema específico para la clase docente".
La ministra de Vivienda, Marina Gonçalves, añade que la política de vivienda, siendo universal, debe garantizar también "respuestas a situaciones específicas", como la de los profesionales desplazados.