El nuevo Gobierno ya ha dado el visto bueno al proyecto de demolición de estos inmuebles, cuya finalización está prevista para diciembre de este año e incluye la demolición de 89 viviendas, más 50 dependencias y siete restaurantes.

"Lo que se decidió fue dividirlo en dos fases. La primera fase - demoliciones y rehabilitación urbana; la segunda fase - reperfilamiento y renaturalización", dijo, en declaraciones a Lusa, el presidente de la Cámara de Esposende, Benjamim Pereira.

El alcalde del municipio del distrito de Braga se reunió con el Secretario de Estado de Medio Ambiente y Energía, Emídio Sousa, que ya había seguido las obras de demolición de un chiringuito en Apulia y visitado algunos de los lugares en riesgo debido a la erosión costera.

Benjamim Pereira también dijo que mantendrá una reunión con el equipo de diseño para avanzar en el proyecto de ejecución de la primera fase, que implica la demolición completa de todos los edificios de Cedovém.

"Sería malo que [a finales de año] no estuviera listo el proyecto de ejecución. Esto va a ir muy deprisa, no podemos esperar hasta finales de año. Temo de verdad que el próximo invierno tengamos un problema muy grave de edificios arrasados por el mar", advirtió, calificando de "verdaderamente aterrador" el avance del mar sobre la costa.