La obra ha sido consignada hoy a la empresa Anteros y los trabajos comenzarán esta semana en la zona de Codessais, junto al río Corgo, que se prevé que estén finalizados en diciembre de 2026.

"Tenemos unas piscinas cubiertas absolutamente obsoletas, con un consumo energético enorme, de unos 200 mil al año. Las piscinas exteriores tampoco son adecuadas para Vila Real, son demasiado pequeñas", explicó Rui Santos.

Las piscinas actuales de la ciudad tienen más de 40 años.

Para el alcalde, la unión de las dos piscinas, ya que actualmente los espacios están separados, permitirá también "ganar escala y energía", destacando que, con el mismo valor, será "posible triplicar el número de usuarios".

La futura piscina cubierta contará con ocho calles de 25 metros, dos de las cuales podrán ampliarse a 50 metros, lo que permitirá realizar entrenamientos olímpicos, y tendrá capacidad para acoger a 1.600 usuarios al día. La piscina exterior tendrá capacidad para 800 usuarios.

El Ejecutivo anunció en 2017 la intención de sacar adelante el complejo, pero, según Rui Santos, como consecuencia de un "conjunto de vicisitudes", solo ahora ha sido posible consignar la obra.

En 2022, el Tribunal de Cuentas(TdC) denegó al Ayuntamiento de Vila-real el visado para suscribir un préstamo bancario de hasta 15,5 millones de euros para la construcción del complejo.

"Tuvimos que reformular todo el proceso que llevó a la financiación de esta obra. Obtuvimos el visado del TdC para esta financiación [noviembre de 2023], lanzamos el concurso público internacional, volvimos al TdC para obtener el visado del proceso que llevó a la adjudicación de la obra y hoy lo firmamos", dijo Rui Santos.

Se trata, según el alcalde, de la "mayor inversión en un único proyecto en el municipio de Vila Real".

La inversión en el complejo ronda los 13,7 millones de euros. Al lado, ya está en marcha la construcción de un ascensor que conectará con la zona de acampada, con un coste de unos 1,3 millones de euros.

A pesar del préstamo contraído (por un total de 14 millones de euros), el presidente expresó su confianza en que el municipio pueda obtener financiación en el próximo marco comunitario para algunos componentes de la obra.

Además de las piscinas, el proyecto incluye la remodelación de todo el parque del lugar, la mejora del acceso a la zona del río Corgo y la transformación de la antigua estación de bombeo en museo.

Las piscinas descubiertas no abrirán este verano ni el próximo, pero, en cambio, las cubiertas sí permanecerán abiertas durante el periodo estival.

"La opción es clara, sólo en verano es posible mover tierra de forma relativamente segura", destacó Rui Santos, justificando el inicio del proyecto en esta época.

Una vez concluidas las obras, el edificio de la piscina cubierta será demolido y el espacio transformado en aparcamiento.

Preguntado por los retrasos en las obras en curso en la ciudad, Rui Santos reconoció que ha habido problemas.

"Hay contratistas que no han cumplido, pero las obras han avanzado y están casi todas terminadas", subrayó, poniendo como ejemplo los retrasos en las obras de saneamiento de Fonteita y Adoufe y Vilarinho da Samardã, con la instalación de ascensores (Calvário y puente metálico) y con el pabellón de deportes, cuyas obras fueron rescatadas y se lanzará un nuevo concurso público para completar la ejecución de cerca de 400 mil euros.