Con un gasto total de 114,5 millones de euros, el Metro de Lisboa tendrá en servicio a principios del año que viene 42 nuevos vagones que serán "más modernos" y "más accesibles". Los nuevos vagones no sólo tendrán mayores ventanas, aire acondicionado y pantallas digitales, sino que además no tendrán rampas ni pendientes, lo que los hará más accesibles para las personas con movilidad reducida.
El ministro de Infraestructuras destacó en su intervención la importancia de este tipo de inversión, señalando que es la mayor de los últimos 24 años. En total, cada unidad triple dispone de noventa plazas, treinta de ellas prioritarias, señaladas con un color diferente y suficientes para dos sillas de ruedas. Como explicó Miguel Pinto Luz, Ministro de Infraestructuras y Vivienda, "hay una inversión [en el Metro] que no existía desde hace décadas. Una política de continuidad y refuerzo, para hacer el sistema más integrado, eficiente y predecible".
El Metropolitano convocó un segundo concurso público internacional a finales de 2023 para la compra de 24 nuevas unidades triples (72 vagones) que complementen la flota actual ante la expansión de la red, además de la adquisición de estas 14 nuevas unidades.
El ministro reconoció que en ocasiones "hay motivos de queja" sobre el funcionamiento del metro, pero pidió tolerancia a los viajeros, subrayando que "se están produciendo cambios tecnológicos". Estamos pensando en el futuro y en mejorar el servicio público", concluyó.